Las manos en la cara del portugués fueron una mala señal para el cuerpo técnico luso que sabe que el físico de su jugador estrella no está en óptimas condiciones.
Los médicos de la selección no dieron el parte médico y tampoco lo emitió la Federación portuguesa. Pero parece difícil que Cristiano llegue al primer partido del grupo frente a Alemania.
Desde principios de abril, el portugués tiene una molestia en la rodilla izquierda que no le permite jugar con normalidad. El trajín de los 48 partidos que disputó durante la temporada repercutió sobre su rodilla justo en la antesala del Mundial.
El jugador de Real Madrid nunca se cuidó como le recomendaron los médicos del conjunto "merengue", quienes le habían pedido que hiciera reposo y se perdiera algunos encuentros determinantes para el equipo de Carlo Ancelotti.
Cristiano vio otros médicos en forma particular y ellos le dieron el aval para seguir jugando. Los doctores del Real Madrid le habían advertido que si no reposaba, su recuperación se iba a extender. Pero el portugués nunca hizo caso y su rodilla llegó muy afectada a Brasil.
Mañana se espera que Portugal dé el parte médico y explique en qué condiciones está uno de los mejores jugadores del mundo. El rostro del jugador transmitió malas noticias. La posibilidad de que se quede sin jugar en la Copa del Mundo está latente.
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